¿Qué es la hemodinámica?

Hemodinámica Es el estudio del flujo sanguíneo. Se enfoca en cómo el corazón distribuye o bombea sangre por todo el cuerpo. El estudio de la hemodinámica integra varias ciencias, incluidas la biología, la química y la física..

A medida que el corazón bombea sangre a través de los vasos sanguíneos, ayuda a suministrar oxígeno a los órganos y tejidos del cuerpo. Este proceso es de vital importancia para que el cuerpo pueda mantenerse. Los problemas con el sistema hemodinámico pueden causar problemas de salud graves, el más común de los cuales es la hipertensión.

Términos clave

  • Hemodinámica: el estudio del flujo sanguíneo
  • Ritmo cardiaco (o pulso): la cantidad de veces que un corazón late en un minuto
  • Volumen sistólico: el volumen de sangre bombeada por un ventrículo cada vez que se contrae
  • Salida cardíaca: una medida de qué tan eficientemente el corazón mueve la sangre a través del cuerpo
  • Resistencia vascular sistémica: la resistencia que el corazón debe superar para bombear sangre con éxito a través del cuerpo
  • Presión sanguínea: la fuerza ejercida contra las paredes de los vasos sanguíneos por la sangre a medida que fluye a través de ellas

El sistema hemodinámico.

Los elementos clave del sistema hemodinámico incluyen frecuencia cardíaca, volumen sistólico, gasto cardíaco, resistencia vascular sistémica y presión arterial..

Ritmo cardiaco, o pulso, es el número de veces que un corazón late en un minuto. los volumen sistólico es la cantidad de sangre bombeada por un ventrículo cuando se contrae. Con base en el pulso y el volumen sistólico, podemos calcular el salida cardíaca, que es una medida de la cantidad de sangre que el corazón (específicamente, el ventrículo izquierdo o derecho) puede bombear por unidad de tiempo. Se calcula utilizando la siguiente fórmula:

Gasto cardíaco = frecuencia cardíaca x volumen sistólico

El volumen medio de accidente cerebrovascular en humanos es de 75 ml por latido cardíaco. Con ese volumen sistólico, un corazón que late 70 veces por minuto tendrá un gasto cardíaco aproximadamente equivalente al volumen total de sangre en el cuerpo.

El gasto cardíaco es, por lo tanto, una medida de qué tan eficientemente el corazón puede mover la sangre por todo el cuerpo. En nuestras actividades diarias normales, la producción debe ser tal que el cuerpo pueda distribuir sangre en función de las demandas que se le impongan. El ejercicio es un ejemplo común de la necesidad de aumentar el gasto cardíaco.

El gasto cardíaco está relacionado con la ley de Ohm. La ley de Ohm establece que la corriente que pasa a través de algún conductor es proporcional al voltaje sobre la resistencia. Similar a un circuito, la vía del flujo sanguíneo a través del cuerpo está relacionada con la resistencia al flujo ejercido por los vasos sanguíneos. La resistencia vascular sistémica es la resistencia que el corazón debe superar para bombear sangre con éxito a través del cuerpo. El gasto cardíaco multiplicado por la resistencia vascular sistémica es igual a la presión arterial..

Cuando el gasto cardíaco se ve afectado (por ejemplo, debido a insuficiencia cardíaca), el cuerpo tendrá dificultades para controlar sus necesidades diarias. Una disminución en el gasto cardíaco resulta en una disminución en el oxígeno disponible para los tejidos y órganos del cuerpo..

Cómo aumentar el flujo sanguíneo

El ejercicio regular es uno de los medios más comunes y efectivos para aumentar el flujo sanguíneo. También es importante estirar el cuerpo después de estar sentado durante períodos prolongados de tiempo. Simplemente levantarse y caminar durante unos minutos después de un largo período de sesión ayudará a aumentar el flujo de sangre a través del cuerpo..

Monitoreo hemodinámico

El estudio de la hemodinámica es de vital importancia ya que el cuerpo necesita oxígeno para funcionar. En medicina, el monitoreo hemodinámico se usa para evaluar esta relación entre el sistema cardiovascular y las necesidades de oxígeno de los tejidos del cuerpo. Dichas evaluaciones están diseñadas para permitir a los profesionales médicos tomar decisiones adecuadas para sus pacientes..

Del mismo modo, cuando estas evaluaciones indican que un paciente tiene problemas para satisfacer sus propias necesidades de oxígeno, se clasifican como hemodinámicamente inestables. Estos pacientes reciben asistencia mecánica o farmacológica para que puedan mantener la presión arterial y el gasto cardíaco necesarios..