Nombre:
Tarbosaurus (griego para "lagarto aterrador"); pronunciado TAR-bo-SORE-us
Habitat:
Llanuras de inundación de Asia
Período histórico:
Cretácico tardío (hace 70-65 millones de años)
Tamaño y peso:
Cerca de 40 pies de largo y cinco toneladas
Dieta:
Dinosaurios herbívoros
Características distintivas:
Cabeza larga; armas excepcionalmente pequeñas
Cuando sus fósiles se descubrieron por primera vez en el desierto de Gobi en Mongolia, en 1946, los paleontólogos debatieron si Tarbosaurus era una nueva especie de Tyrannosaurus, en lugar de merecer su propio género. Claramente, estos dos carnívoros tenían mucho en común: ambos eran grandes carnívoros con numerosos dientes afilados y brazos pequeños y casi vestigiales, pero también habitaban en lados opuestos del globo, Tyrannosaurus Rex en América del Norte y Tarbosaurus en Asia.
Últimamente, la mayor parte de la evidencia apunta a Tarbosaurus como perteneciente a su propio género. Este tiranosaurio tenía una estructura mandibular única e incluso extremidades anteriores más pequeñas que T. Rex; Más importante aún, no se han encontrado fósiles de Tarbosaurus fuera de Asia. Incluso es posible que Tarbosaurus tuviera precedencia evolutiva, y engendró Tyrannosaurus Rex cuando algunas personas resistentes cruzaron el puente terrestre siberiano hacia América del Norte. (Por cierto, el pariente asiático más cercano de Tarbosaurus era un tiranosaurio aún más oscuro, Alioramus).
Recientemente, un análisis de un fósil de Parasaurolophus reveló numerosas marcas de mordeduras de Tarbosaurus, en patrones que indican que este tiranosaurio eliminó metódicamente el cadáver ya muerto de su víctima en lugar de perseguirlo y matarlo. Esto no resuelve de manera concluyente el debate sobre si los tiranosaurios eran cazadores o carroñeros (probablemente siguieron ambas estrategias, según sea necesario), pero sigue siendo una evidencia valiosa.